lunes, 14 de marzo de 2011

Esclavos del tiempo.

Estaba sentada, en las escaleras del portal, con la puerta abierta dejando que entrase en frio y viendo como caía la lluvia, con los brazos en mis rodillas y con la mirada perdida, lo único que alcanzaba a contemplar era el vapor de mi aliento.
Mi mente daba vueltas, sin llegar a una solución y una acción donde tener una oportunidad. Y comenzaron a caer lágrimas, por arrepentimiento, dolor, tristeza, depresión, sentimiento de culpa e inutibilidad, eran las causantes de ellas. Y ya todo empieza a darme igual, todo es siempre igual, nada es único, te vuelves esclavo del tiempo, ai es cuando entiendes que tu tiempo es desechado y no puedes seguir adelante, no deseas seguir adelante. Los sentimientos, las inquietudes, habilidades todo parece desaparecer.
Al igual que todos esos lujos, los cuales todos tenemos pero no sabemos apreciar y tarde o temprano vamos perdiendo.  Simplemente detenerte en la mitad de uno de tus días y pensar en lo que has hecho y las cosas que dejaste pasar, luego regresas una semana, meses y años, y puedes ver como has dejado pasar el tiempo, aunque en verdad el tiempo te ha dejado pasar a tí.
Muchas veces he escuchado eso de, solo son recuerdos, que no te ocupen el presente, piensa en el futuro y empieza a realizarlo hoy.. tan facil parecía.
 Y si, sigo aquí sentada en el suelo de la escalera, contemplando el vapor de mi aliento po el frio y ya es de noche, escucho puertas y cercas, voces, insultos, risas.. palabras que el viento se lleba. Viendo que he de hacer, donde esta mi camino, pero no lo encuentro, y sigo aqui parada sin dirección, no encuentro cual es mi lugar, nose a donde ir, ni que hacer.

jueves, 10 de marzo de 2011

Lo que nos hace humanos.

En el fondo, a todos nos gusta pensar que somos fuertes. Que vamos a poder con todo lo que nos venga encima, que pudimos con lo de ayer y que podremos también con lo de mañana. Pero más en el fondo, todos sabemos que eso no es verdad. Porque ser fuerte no consiste en ponerse una armadura antirrobo, ni en esconderse detrás de un disfraz; ser fuerte consiste en asimilarlo. En asimilar el dolor y en digerirlo, y eso no se consigue de un día para otro, se consigue con el tiempo. Pero como por naturaleza solemos ser impacientes y no nos gusta esperar, escogemos el camino corto. Escogemos el camino de disfrazarnos de algo que no somos y disimular. Sobretodo DISIMULAR... Sí, a todos nos gusta disimular los golpes, sonreír delante del espejo y salir a la calle pisando fuerte, para que nadie note que en realidad, lo que nos pasa de verdad, es que estamos rotos por dentro. Tan rotos que ocupamos nuestro tiempo con cualquier estupidez con tal de no pensar en ello, porque el simple hecho de pensarlo hace que duela...
Pero a veces, bueno… a veces tienes que darte a ti mismo permiso para no ser fuerte, bajar la guardia y darte una tregua. Está bien bajar la guardia de vez en cuando. No queremos hacerlo porque eso supone tener un día triste, uno de esos viernes que saben a domingo, un día de esos que duelen, de recordar y echar de menos. A los que ya no están, y a los que están, pero lejos. Sin embargo, hay momentos que es lo mejor que puedes hacer: darte una tregua. Poner tu lista de reproducción favorita, tumbarte en la cama, y llorar. Llorar todo lo que haga falta. Eso no nos hace menos fuertes; eso es lo que nos hace humanos.

Carnaval 2011.

  La tribu: CC + B&W = A^C.

Olea, Aurora, Lola, Ana, Cai, Bea, Alba:

Aurora, Marta, Olea, Wando, Lola, Bea, Cai; Cobos:

Cobos, Aurora, Bea, Cai, Lola, Olea, Marta, Wando:

Ana, Cobos, Wando, Aurora, Marta, Lola, Cai.

Cai, Cobos, Marta:

Cai, Lola, Aurora:

Cai, Alba, Lola, Aurora, Marta:

Manu, Cai, Cobos, Marta:

Violeta, Ana, Sheila, Cai:

Cai, Marta, Lola:

Tomas, Cai, Lola:

Lola & Cai:

Cai & Alba:

Helena & Cai:

Olea & Cai:

Cai & Edu:

Gonzalo & Cai:

Javi & Cai:

Pablo & Cai:

Pua & Cai:

Pla & Cai:

Moreno & Cai:

Pablo & Cai:

Manu & Cai: